Desayuno con Diamantes para UNICEF; por J Rodríguez
El pasado domingo 17 de octubre, la primera noticia que oí por la radio al levantarme fue que se habían conseguido 430.000 € en la subasta en Berlín de una hoja con diez sellos con la imagen de Audrey Hepburn, destinándose ese dinero a beneficio de UNICEF, a través de la Fundación Audrey Hepburn para la infancia.
El sello muestra el rostro de la actriz en sombras y fumando un cigarrillo sacado de un fotograma de la película “Desayuno con Diamantes” (Breakfast at Tiffany's) de 1961, una de mis favoritas, y por la que fue nominada al Oscar como mejor actriz. En el año 2001 se realizó una tirada de 14 millones de ejemplares por el Correo Alemán, sin embargo la familia no permitió su difusión, por considerarlo no adecuado y fueron destruidos los ejemplares, pero seis folios sobrevivieron a la quema. Uno se encuentra en el archivo de Correos de Alemania y otro en el archivo de filatelia en Bonn. Un folio fue entregado al hijo de Audrey Hepburn, Sean Hepburn Ferrer, que tiene los derechos de imagen de su madre y es el que ha sido subastado, y otros tres desaparecieron del Ministerio de Finanzas, de los que han aparecido cinco sellos en cartas enviadas desde Berlín, y sólo uno se había subastado hace un año, por un importe de 53.500 euros.
Audrey Hepburn ha sido considerada como una persona de gran belleza y una gran actriz (El American Film Institute la considera la tercera mejor estrella femenina de todos los tiempos), a pesar de que ella en sus memorias se considera una chica poco agraciada. Pero mas allá de su belleza y elegancia externa, se debe destacar su belleza interior, ya que Audrey realizó abundantes acciones humanitarias, destacando sus actuaciones como embajadora de UNICEF, siendo nombrada en tal función en el año 1989.
En su nombramiento como Embajadora de Buena Voluntad de UNICEF dijo: “Sé perfectamente lo que el UNICEF puede significar para los niños, porque yo estuve entre los que recibieron alimentos y ayuda médica de emergencia al final de la Segunda Guerra Mundial. Tengo una enorme gratitud hacia el UNICEF y una confianza sin límites en lo que realiza”. Incluso ante el desastre la belleza de esta mujer que murió en enero de 1993, poco antes de cumplir los 63 años queda de manifiesto y nos sirve para reflexionar sobre como continúa la persistencia de las desigualdades, la pobreza y el hambre en el mundo, que continúan afectando a los más débiles.
Pero incluso después de 17 años de su muerte Audrey Hepburn sigue ayudando a la infancia, y frases domo las de su hijo, Sean Ferrer, son muy agradables: “Deseo que la gente recuerda a Audrey Hepburn como una persona humanitaria y una estrella de cine, más que como una estrella de cine humanitaria. Algo de lo que estamos muy orgullosos en la familia”.
Una persona humanitaria y una excelente estrella de cine que me sigue haciendo soñar, cada vez que oigo este tema y vuelvo a ver sus películas.
Esta canción fue compuesta por Henry Mancini y logró el Oscar a la mejor canción original en 1961, en cuya ceremonia fue cantada por Andy Williams.
1 comentario:
Como lector, mis felicitaciones a Jesús Rodríguez por su oportuno y tierno artículo. Y como editor, mi agradecimiento por ésta y tantas otras colaboraciones por autor y por su ayuda en la edición.
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